GASTRONOMÍA Y ENOTURISMO


 A medida que aumenta el turismo mundial y la competencia entre destinos, el patrimonio cultural intangible local y regional único se convierte cada vez más en el factor de discernimiento para atraer a los turistas.


Para muchos destinos, la elaboración de alimentos, así como la de vinos, representan una parte integral de su historia e identidad y se han convertido en el elemento clave de la imagen de marca de la nación. El turismo gastronómico y enológico representa una oportunidad para revitalizar y diversificar el turismo, promover el desarrollo económico local, implicar a muchos sectores profesionales diferentes y aportar nuevos usos al sector primario. Así pues, el turismo gastronómico y enológico contribuye a la promoción y a la imagen de marca de los destinos, al mantenimiento y la preservación de las tradiciones y diversidades locales, y al aprovechamiento y la recompensa de la autenticidad. 





El Comité de Turismo y Competitividad (CTC) de la OMT define el turismo gastronómico como un tipo de actividad turística que se caracteriza por la experiencia del visitante vinculada a la comida y a los productos y actividades relacionados con ella durante el viaje. Junto con las experiencias culinarias auténticas, tradicionales y/o innovadoras, el Turismo Gastronómico también puede implicar otras actividades relacionadas como la visita a los productores locales, la participación en festivales gastronómicos y la asistencia a clases de cocina. Mientras que el Enoturismo, como subtipo del Turismo Gastronómico, se refiere al turismo cuyo objetivo es visitar viñedos, bodegas, degustar, consumir y/o comprar vino, a menudo en su origen o cerca de él.

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El Viaje de la Alegría introduce una metodología innovadora para identificar la relación existente entre las bodegas y su entorno, incluidas sus influencias en la historia, la socioeconomía y la cultura locales y regionales. Esta relación crea el marco de un producto para experimentar España a través de sus bodegas y el entorno en el que se han desarrollado. Esta herramienta metodológica puede ser adaptada y replicada en diferentes regiones para ayudar a que los destinos se promocionen a través de su marco enológico, lo que también ayudará a destacar otros aspectos como la cultura, la historia y la tradición.     


El proyecto se ha llevado a cabo en España en colaboración con el miembro afiliado Leading Brands in Spain Forum y con la participación de cinco grandes bodegas españolas de diferentes regiones vinícolas: Galicia, La Rioja, Penedés, Priorato, Ribera del Duero, Somontano, Toledo y Toro.


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